Sí, es verdad que el término “limpieza de primavera” suele oírse más en series o películas americanas que en nuestro día a día. En realidad, es un equivalente a esa limpieza general que suele hacerse dos veces al año coincidiendo con el inicio de la primavera y el otoño. Aunque se parecen, cada una tiene sus peculiaridades para acondicionar la casa de cara al cambio de temperaturas. Mientras que en la primera tocará ir lavando mantas para guardarlas, en la segunda será todo lo contrario.
En cualquier caso, a continuación te contamos cómo dejar tu casa impecable sin que parezca un campo de batalla y sin que dure una eternidad. ¿Un truco que nunca falla? ¡Ponerte música marchosa!
Claves para planificar la limpieza de primavera
Dedica unos minutos para trazar tu plan de limpieza. Responder a estas preguntas te ayudará a organizarte mejor: ¿Le vas a dedicar un día o varios? ¿Vas a hacerlo solo o acompañado? ¿Prefieres hacerlo por estancias o por tareas?
- Hacerlo por estancias implica no empezar con una habitación hasta que no hayas acabado con la anterior. Esto es práctico sino cuentas con mucho tiempo seguido ya que evitarás ver la casa empantanada de cosas (que desembocará en agobio seguro)
- Por otro lado, si tienes tiempo y prefieres dedicarle el día entero (y quitártelo de encima hasta el otoño) lo mejor será que lo hagas por tareas. Esto consiste en limpiar el polvo, barrer o aspirar por toda la casa a la vez. Tardarás más pero te ahorrarás tener que estar sacando y guardando los utensilios cada dos por tres.
Dormitorio y cambio de armarios
Hay quienes aprovechan la limpieza de primavera para hacer el cambio de armario, mientras que otros prefieren hacerlo en días distintos. Sea como sea, deberás coger la ropa de invierno y lavar lo que no esté limpio para guardarlo en buenas condiciones. Aprovecha para limpiar el polvo del armario y donar (o tirar) aquello que no utilices.
¿Crees que necesitas más espacio o unos armarios mejor distribuidos? Echa un vistazo a esta selección de armarios y apunta en un papel cuál es el tipo de armario que necesitas en tu vida. Cuéntanoslo cuando vengas a visitarnos y ¡llévatelo a casa!
Y ya que estás en el dormitorio, organiza y limpia las mesitas de noche y las cómodas. Presta especial atención a la ropa de cama, lava el edredón, las almohadas y dale la vuelta al colchón. ¿Te apetece renovar los cojines con algo de color? En nuestra exposición encontrarás muchas propuestas.
Salón y limpieza de textiles
Al igual que el dormitorio, el salón cuenta con numerosos textiles que necesitan una limpieza en profundidad para prevenir alergias y mantener alejados a los ácaros. Lavar las cortinas, los cojines y aspirar la alfombra y el sofá son las tareas básicas en este punto.
Además, dale un repaso al mueble de la televisión, a la mesa del centro y al aparador: todo lo que no sirva ¡fuera! Las lámparas, los cuadros, las puertas y los rodapiés son también lugares que hay que limpiar para que las pelusas no campen a sus anchas. Para las ventanas puedes elegir otro día ya que llevan más tiempo.
Consejos para una limpieza de primavera segura
Siempre que hay productos de limpieza de por medio conviene tomar una serie de precauciones como leer la etiqueta de cada producto de limpieza y seguir las instrucciones. Nada de hacer experimentos y mezclar productos porque puede ser peligroso. Cuando termines guárdalos bien cerrados y alejados del alcance de los niños.
Además, deberás procurar que la zona esté bien ventilada, tanto para renovar el aire de la estancia como para evitar inhalar los vapores tóxicos de los productos. Si tienes alergias o problemas respiratorios usa mascarilla. Además, los guantes pueden ayudar a prevenir reacciones en la piel como enrojecimiento o erupciones por contacto con algunos de estos productos.
Por otro lado, si quieres evitar un accidente doméstico tendrás que eliminar cualquier desorden del suelo para evitar tropezar, como por ejemplo alfombras enrolladas o cajas de almacenamiento. Aquí tienes otros consejos a tener en cuenta:
- Los suelos mojados son una zona de peligro de resbalones y caídas. Deja que se sequen antes de caminar sobre ellos. ¡Que no te puedan las prisas!
- Aunque resulte tentador, evita subirte a un taburete para llegar a los altillos. Es preferible que elijas taburetes con escalones que ya están pensados para hacer de escaleras. Ah, y nunca intentes moverlo mientras estás sobre él.
- Cuando levantes muebles y otros objetos pesados dobla las rodillas no la espalda, o te pasará factura durante varios días.
Y después de haber dejado tu casa limpísima, toca darle una vuelta a la decoración. Ven a vernos cuando quieras. Nuestro horario es de lunes a sábado por la mañana de 10.00 a 13.30 h y por la tarde de 16.30 a 20.30 h.
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